Barcelona, diciembre 2018
Rosa Ortiz, Directora General del Parque de Atracciones Tibidabo, explica su gestión en esta institución enfatizando que el eje de esa gestión en este momento de transformación son las personas, los empleados de la empresa.
-¿Qué diferencia la gestión del Parque de Atracciones Tibidabo de otras organizaciones?
El TIbidabo es un lugar emblemático y mágico de la ciudad de Barcelona, sus vistas, su historia y la vinculación emocional de los clientes y trabajadores hacen que sea un lugar muy especial.
La gestión del parque se basa en la generación de experiencias positivas que pasarán a formar parte de historia de muchas familias que han vivido momentos felices en compañía de sus seres más queridos.
-Es una entidad muy condicionada con la tecnología y avances tecnológicos ¿supone un gran esfuerzo mantener un ritmo ágil?
Representa una adaptación al cambio constante y a la innovación no solo en tecnología sino en todo lo que representa anticiparnos a lo que pueda sorprender a nuestros clientes de forma positiva en su visita.
-En el Foro Anual del Club Excelencia en Gestión se habló sobre fidelización de empleados y la importancia de las personas ¿cuáles son sus prioridades con respecto a las de Tibidabo?
Los trabajadores y trabajadoras del parque son el valor más importante del Tibidabo, la máxima satisfacción que un cliente puede encontrar no está en las atracciones ni en los espectáculos, está en la relación con los trabajadores. Ellos lo saben y les motiva para seguir buscando esos momentos mágicos que se producen con una mirada alegre o una sonrisa.
-Siguiendo con su intervención en el Foro Anual ¿cuál es el GPS de su organización y cuál recomendaría?
EL GPS en mi caso estaría en las personas, en conocer y establecer las relaciones que nos hacen sentir valorados, importantes, queridos, tanto si se trata de clientes internos como externos.